Beograd

Beograd

lunes, 25 de octubre de 2010

De garitos por Belgrado (I)

Muy buenas muchach@s!

Ya hasta disfrutando de la noche belgradense. Aquí la noche es como la española: se bebe primero en casas (aunque esto en España todos sabemos que es algo complicado) y luego a uno o dos garitos. Y las discotecas cierran a las 5 ó 6, depende la discoteca y el día.
Como características generales de la noche de aquí, podríamos comentar que se puede fumar en todos lados (hasta en la oficina, de día, claro, la peña fuma). La entrada a los sitios es o suele ser gratuita, tan sólo hay que dejar el abrigo en el ropero y fuera (1€ por prenda). Y los precios de las consumiciones en las discotecas son de unos 3 ó 4 € (si es una cerveza, son 2,50€)... realmente algo menos, ya que la moneda se devalúa poco a poco cada día que pasa... vamos, que las copas son cada día más baratas.

El primer día de fiesta fue el primer viernes. Pero antes, el jueves, fuimos a un sitio perfecto para tomar las primeras de la noche: El Tijuana. Es un pub que está en el segundo piso de una casa normal, en la que hay un pub dentro. Es bastante curioso porque no pone en ningún lado que esté ese garito en la segunda planta y tras atravesar el cutre portal muy acorde con el edificio y subir un plar de plantas, nos encontraremos con una puerta entreabierta con lucecitas rojas y tal... parece un puti, pero no, es un garito :D. Aún no hemos exlotado ese lugar (además, lo lleva un mexicano amiguete), pero yo espero volver en repetidas ocasiones.
Próximamente subiré algún vídeo con el acceso al garito.

Ya el viernes, estuvimos en casa de Javi bebiendo un rato Elena, Javi (porque era su casa, que si no...), Noelia y yo y luego, nos fuimos a un garito recomendado por Jelena, nuestra vecina e hija de nuestro casero: The Tube. Entre Javi y yo nos bajamos casi una botella de 1L de Absolut antes de ir al garito. Una vez allí, en la "cola" (ya que no había, pero aún así estuvimos esperando en la puerta por si nos hablaban... que aquí no se entiende nada) hablando en español veo que un serbio muy alto se nos queda mirando. A mí me dio la sensación de que nos entendía, así que le pregunté algo en español (que ahora no me acuerdo). El tío resulta que estuvo viviendo 15 años en España. Descripción del notas: Entraba solo al garito; 46 años. Con eso lo digo todo. Era pura energía el colega, y cuando se le apagaban las pilas, ahí estaba yo para zarandearle un poco. Lo mejor de todo es que al día siguiente, dando una vuelta por Silicon Valley, fuimos a un sitio a tomar una cocacola y ahí llegó él, justo a la mesa de al lado. Menuda coincidencia!
The Tube un garito normal, con música house y techno. No estuvo mal la noche.
De este garito no hay fotos ya que viendo el percal (posible pérdida o rotura de cámara de fotos por embriaguez) Elena se volvió con la cámara a casa (ella trabajaba al día siguiente por la mañana, por lo que no se vino de fiesta... ya la engañaríamos otro fin de semana :D)

Eso fue un viernes. El martes siguiente era el día de la hispanidad, por lo que ninguno curramos. Aprovechamos los sabios consejos de nuestro consejero serbio que habla perfecto español (Nemanja o Nemaña o tan sólo Nemo), un chavaluco de veintipocos años, para reservar el lunes a la noche una mesa en un garito (Mr. Stefan Braun) situado en el noveno piso de un edificio de oficinas del centro de Belgrado.


Nosotros preocupados porque era un lunes y al día siguiente los serbios curraban y no fuera a ser que el garito estuviera vacío. Juás. Ilusos que somos. El garito estuvo de puta madre (con perdón si alguien se ofende): buena música, buen ambiente, chicos como armarios 4x4x4, chicas altas de más de 1,90m (Javi mide eso y vimos BASTANTES más altas que él) y copas cortas (en vaso de chato... qué vergüenza).



Y venga vídeos:







En los vídeos se puede apreciar un poco la fiesta que había, acompañada ésta de las vistas.. ¡Y me refiero a los edificios!


Lo bueno que como teníamos un reservado, venían a buscarnos y a traernos las copas. Por no hablar de las vistas y lo raro que se hace estar en un edificio que parece de oficinas, teniendo esas vistas desde un garito en un noveno piso.


Esa noche, en el Stefan Braun había peña conocida del mundo de la farándula serbia: de gran hermano y sucedáneos. Claro, que nosotros no conocíamos ni a Peter ni a Rita. Pero debían de ser famosetes porque la gente estaba como loca.
De lo mejor del garito son las gogós. Ya estáis pensando "lo típico" o "claro, como eres un tío"... pues puede que tengáis razón. Aún así, las gogós, que hacen de camareras cuando no están, digamos, bailando, se lo montan las unas con las otras y todo ello agarrándose por unas barras/tuberías que van por el techo y subiéndose las unas sobre las otras. Estrógenos en estado puro.


Además, aunque nosotros no lo catamos, a la salida del Stefan Braun hay un sitio de Pljeskavice, para el que salga con hambre tras una dura noche.

El siguiente viernes era la inauguración de la nueva temporada del Plastic. Un lugar que me recordó al Razz de Barcelona porque por callejones se va a diferentes salas, aunque en versión más pequeño, claro. Un poco más de lo mismo, house y techno, aunque en la sala en la que más tarde aguanta la gente (la sala principal a las 5 ya está vacía) ponen un poco de todo: house tranquilito, musica un poco más comercial... También tiene reservados como la mayoría de las discotecas aquí. La entrada es gratuita, aunque cuando quise atravesar la puerta donde está el portero me detuvo como si de un balonazo se tratase y me obligó a dejar la ropa en el ropero (sólo los abrigos, vamos). Vamos, se paga el ropero y se entra tan pichi.

Y esto es todo por ahora... de momento. A buscar una buena fiesta de Halloween este fin de semana que viene gente de Budapesti
Nos vemus!

domingo, 24 de octubre de 2010

Primeros días en Belgrado

Muy buenas a todos!

Llevo queriendo meter aquí esta información y más, pero parece que no había días para hacerlo. Por fin parece que he encontrado un hueco para callar bocas a todos los que decían que no actualizaría el blog de vez en cuando (al menos las callo de momento, en un mes ya se verá).
Llegué el 3 de Octubre a la noche con mis otros dos compañeros de IC3X: Javier, un chaval al que le pirra Rusia, y Noelia, posiblemente la más joven de todo el IC3X (junto al más longevo... yop). Lo primero que nos dimos cuenta al llegar fue que la escala que hicimos en Roma con Alitalia (Madrid - Roma - Belgrado) la debimos de hacer demasiado rápido, ya que nuestras maletas no estaban en Belgrado a la vez que nosotros. Días después, tras haberlo denunciado en el aeropuerto y haber llamado al seguro, sucede que:
  • Alitalia: hace lo imposible para no pagar: tarda en contestar, pide originales de documentación que ni tenemos... lo típico.
  • El seguro es de reembolso, no de indemnización, por lo que no nos pagarán ni el aire. Tan sólo el coste de las llamadas que hicimos desde Belgrado al número de teléfono del seguro. Esto es, siempre que perdáis una maleta, GASTAROS PASTA EN ROPA (lo típico: ropa interior, un traje de Armani para ir a currar... y eso sí, guardad los tickets) porque si no, no veréis ni un euro.
Ya con la maleta, las primeras impresiones que uno puede coger de Belgrado es que es, siempre bajo mi humilde opinión, una ciudad feúcha que tiene su aquél. Es una ciudad gris con edificios derruidos en el centro de la ciudad, las calles son estrechas, donde las aceras no existen.



Conducen como si les persiguiese la policía. Tiran del claxon muy fácilmente, lo que hace aún más ruidosa la ciudad (si los autobuses, los tranvías y los trolebuses no fueran ya suficiente). Por la noche, los principales edificios de la ciudad están iluminados, lo que le da otro toque a la ciudad.
Aún así, lo mejor sin duda es que hay muuucha vida nocturna y mucha gente en la calle a todas horas. Sobretodo lo de la vida nocturna :D


Con respecto al clima, de momento no sufrimos frío polar (tan sólo un par de días). Y en casa, al haber calefacción central, podríamos estar siempre en manga corta.

La asignatura pendiente que tenemos es la interrelación con serbi@s, ya que todo el tiempo estamos con españoles, lo cual no es una queja, pero siempre habrá que intentar conocer nuevas culturas, que dicen que enriquece... Pero eso con el tiempo lo arreglaremos.

viernes, 8 de octubre de 2010

Curiosidades de Belgrado/Serbia

Muy buenas chavales,

Este apartado lo hiré actualizando poco a poco, ya sea añadiendo fotos (aún no he hecho ninguna) como añadiendo nuevas curiosidades. Se trata de cosas que tal vez los Belgradeses y Serbios vean como normal, pero que a nosotros nos choca.


Belgrado
Aun no conozco más de Serbia, pero Belgrado es como cualquier ciudad de España... hace 40 años, pero con internet.
Teléfono (aún operativo) de la casa de un compañero:


Tiene tranvías (lo típico), autobuses (lo típico) y Trolebuses, que son una mezcla de autobuses que van enganchados por arriba con unos cables. Estos últimos son los peores (aunque aventurarse en indicar cuál es el peor transporte público es complicado) ya que no hacen más que estropearse a todas horas, por lo que los trolebuses que vayan por detrás tendrán que detenerse hasta que se arregle el trolebus roto. Y pasa bastante a menudo.
La peña conduce como loca. Aquí dos carriles estrechos son 4 carriles, tirando de las aceras y el sentido contrario si hace falta. Es un caos. No se detienen en pasos de cebra, conducen por donde va el tranvía... COMO LOCOS.
Si no sabes Serbio, estás jodido. Yo aquí tiro de mis ratos libres de parque en Madrid jugando a las películas: por señas y sonrisas.

Serbi@s
Los serbi@s se tiran todo el día en la calle. No sé a qué se dedican o si alguien les paga para dar paseos, pero se vaya por donde se vaya, a cualquier hora, siempre hay gente paseando (por la calle, vamos).
Los serbios (ellos) son personas muuuy altas con cara de pocos amigos, en general. Aquí o mides 1,80 o andas jodidillo. Los que no son serbios seguramente harán lo posible por no tener movida con nadie, porque no sólo son altos, sino que son como armarios.
Las serbias, por su parte, tienen las cejas bastante depiladas, los ojos hundidos, la nariz puntiaguda... y suelen estar buenecillas. Tienen de media las piernas más largas que yo haya podido ver hasta ahora en mi vida.


Silicon Valley
Hay una zona en Belgrado que la llaman Silicon Valley. Esta es una zona bastante pija donde hay muy buenas cafeterías, restaurantes... y, además, es donde están todas las chatis operadísimas y mostrándose (y no, no hablamos de prostitutas.. hablamos de mujeres alegres a las que les gusta exhibirse). Van como puertas por la calle con sus escotes, sus piernas largas y demás.

Aceras y Calles
Por aquí se ve algo de policía por las calles. Aquí la policía va con su pachorra a todas partes. No hacen más que o fumar parados o dar paseos (mientras fuman). Otra de las cosas curiosas que hace la policía por aquí es, no sólo ponen multas por cruzar en rojo o por cruzar donde no hay un paso de cebra, sino que ponen multas incluso se estás cruzando en verde si... VAS HABLANDO POR EL MÓVIL!! Al cruzar habría que ir con el manos libres... Así son de quisquillosos. De momento, nosotros nos estamos librando (y espero no actualizar este blog con nueva información sobre este tema; sería una mala señal).
Sobre las aceras... no existen. En cuanto son un pelín anchas, los coches aparcan en ellas.Y hay algunas aceras que una farola plantada en medio de éstas te obliga a ir por la carretera porque lo ocupa todo.


Por no hablar de los agujeros que hay en la parte que pisamos los peatones.

Las señalizaciones de las calles son curiosas.


A parte de que las direcciones vienen en cirílico, los semáforos tienen el color rojo enorme, el verde parpadea cuando se va a poner en rojo, y al pasar de rojo a verde, se enciende antes también el naranja... Las típicas señales de STOP, de dirección única y demás, no están hechas de metal: están iluminadas por dentro, lo que hace que sean mucho más legibles que las españolas las 24h del día.

Basura
Aquí no se recicla nada... Bueno, no es del todo cierto. Nosotros no reciclamos porque no hay diferentes contenedores para ello. Sin embargo, en Belgrado no se ven vagabundos, pero lo que sí se ve es gente removiendo y rebuscando entre la basura. A todas horas y gente que no parece homeless...



Comer/Cenar Fuera
En Belgrado se tira de lo mítico de por aquí: Pljeskavica. Por un euro o euro y medio es una especie de pan hamburguesa, pero de bollo, con forma de pan de pita con carne a saco, lechuga, tomate y demás alimentos típicos, más las salsas que se vea por ahí que triunfen (la ultrapicante casi ni pica). Muy rico todo y por ná de pasta.
Los serbios tiran también mucho de pizzas (muy buenas y tiradas de precio). Y lo más flipante es que tienen cuencos en las barras de este tipo de restaurantes con lo que yo pensaba era tomate: los serbios cogen varios cazos y se los echan a sus porciones de pizzas recubriéndolas enteras. Pero resulta que es KETCHUP! puag, pero qué asquerosos (y ellos nos miran con cara de raros al ver que nosotros no nos echamos ná).
Lo mejor de todo no sólo son los bajos precios y muchos de los sabores de la cocina belgradesa: son las cantidades. Por 6€ cada uno que pagamos el otro día, nos sirvieron unos platos de chuletones de carne con pasta y gnoccis más una ensalada para compartir... y dejamos más de la mitad. Y eso que estábamos comiendo (quiero decir, lo que se supone comer a la hora de la comida) a las 19:00 de la tarde sin haber pegado bocado desde el desayuno!!! Por no decir que sabemos lo que mi estómago puede almacenar... Yo escondí lo poco que a mí me sobró debajo del hueso de mi chuletón porque ya hasta me daba vergüenza todo lo que habíamos dejado ahí...